A continuación te presentamos una lista que recoge algunas de las diferentes maneras que existen de reducir tu huella ecológica. Lo hacemos desde el convencimiento de que, como norma general, los ciudadanos cuidamos muy poco del medioambiente; deberíamos hacer más y tener una mayor conciencia en este sentido.

huella ecológica

Respeta el medioambiente y reduce tu huella ecológica

  • Ahorra energía. Tu huella ecológica será menor si te acostumbras a apagar las luces cuando no sean necesarias, a abrigarte en casa durante el invierno —en lugar de encender la calefacción— o a secar la ropa al aire libre, en lugar de usar la secadora. Éstos son sólo algunos ejemplos de lo que puedes hacer por ahorrar energía, ¡pero hay muchas otras maneras de hacerlo!
  • Intenta comprar alimentos locales, que no hayan tenido que viajar tanto para llegar hasta tu nevera. Cuanto más cortas sean las distancias, menos C02 se habrá empleado para su transporte. Una fantástica iniciativa es la de poner en marcha tu propio huerto, incluso si vives en una ciudad; infórmate de los huertos urbanos que hay en tu zona o barrio.
  • Come menos carne; ¿sabías que la industria cárnica es una de las principales culpables de la acumulación de gases de efecto invernadero? Lo mejor que puedes hacer es reducir el consumo de todo tipo de carnes, e incrementar la ingesta de frutas, verduras y hortalizas; el medioambiente y tu salud lo agradecerán. ¡Y tu huella ecológica será mínima!
  • No uses bolsas de plástico para la compra del supermercado, ¡ni para nada! Elimina estas bolsas de tu vida por completo y pásate a las bolsas reutilizables. Ya no tienes excusas.
  • Reduce tu huella ecológica comprando productos de segunda mano o de ocasión; ¿qué sentido tiene estrenar algo y pagar un alto precio, cuando puedas encontrar el mismo artículo, casi idéntico, a un precio mucho más económico?

¡Hasta la próxima!